Al respecto, cabe señalar que se advierten dos grandes retos de gran importancia para la implementación de la reforma laboral en nuestro país; el primero de ellos es la vacatio legis, ya que a más tardar en 2023 tendrá que haberse completado la entrega de asuntos laborales de las Juntas de Conciliación a los Tribunales Laborales que ahora pertenecerán al Poder Judicial locales y el de la Federación; así como del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral y sus homólogas en las entidades federativas, para dar paso a la nueva conformación institucional que habrá de dirimir las problemáticas laborales.
En segundo término, el tema presupuestal, no solo por cuanto hace a la infraestructura para llevar a cabo la adecuación de los espacios necesarios y la infraestructura incluso tecnológica; sino también respecto de la capacitación dirigida al personal jurisdiccional y a los múltiples operadores del nuevo sistema de justicia, la que deberá ser de manera coordinada entre todas las entidades federativas, las autoridades en materia laboral y el personal de los Centros de Conciliación, es decir, todos aquellos que estarán implicados en asuntos que involucran tanto a patrones como trabajadores, o aquellas diferencias sindicales que se presenten con la finalidad de que estén en posibilidad de dirimir los posibles conflictos, primero a través de la conciliación, con una etapa obligatoria que busca crear una nueva cultura de solución jurídica amigable o autocompositiva; o bien como último recurso ante los tribunales.
También, es importante mencionar que, más allá de los retos presupuestales y organizacionales antes señalados, será necesario instrumentar procedimientos laborales a través de prácticas y criterios que permitan una tutela judicial efectiva de los derechos de los involucrados, que permitan avanzar en la dignificación del trabajo y en el desarrollo de los derechos sociales.
Asimismo, es importante considerar que, la reforma al sistema de justicia laboral conlleva un nuevo marco jurídico que involucra a trabajadores, sindicatos, patrones y autoridades; y, comprende también modificaciones a diversos ordenamientos legales, que están estrechamente vinculados con los ejes de justicia laboral, libertad sindical y negociación colectiva.
La implementación de la reforma en materia laboral, pretende contribuir al acceso a una mejor justicia laboral clara, transparente y asequible para todos, que haga cumplir las leyes en beneficio de trabajadores y patrones, por lo que será primordial contar con un nuevo régimen de relaciones laborales en el que se respeten los derechos de todos, con la finalidad de brindar seguridad jurídica y certeza en beneficio de la sociedad y el desarrollo económico del país.